Lo que necesitamos es una estrella de al menos 5 veces la masa del Sol, o más, porque ellas sí quemarán el carbono en elementos más pesados hasta que se llegue al límite de los elementos que liberan energía al ser fusionados (hierro).
Una vez que esta estrella, que vivió durante muchísimo tiempo, llega a tener un núcleo de hierro, este hierro se desintegra debido a la intensa gravedad, la estrella al no tener sustento implosiona y luego explota fuertemente en una explosión que brillará como cientos de milles de millones de estrellas todas juntas durante algunas semanas. Esta explosión es la supernova, y para ser exactos, supernova tipo II.
Debido a esta fuerte explosión se generan los elementos más pesados que el hierro, como el oro, cobre, mercurio, plata y elementos menos conocidos como el wolframio, berkelio o estroncio. Todos los elementos creados en el interior de la estrella, más los sintetizados durante la supernova, son repartidos al espacio, formando una nueva nebulosa, con polvo de estrellas.
De esta nube, después de millones de años, se formará una nueva estrella, que contendrá los elementos creados en la estrella muerta, y alrededor de esta nueva estrella se formarán planetas, como el nuestro. Es así como se creó el sistema solar hace 4.500 millones de años, a partir del remanente de una supernova, y es por eso que podemos afirmar que somos polvo de estrellas, porque nuestros átomos estuvieron en el interior de una estrella. Los elementos que nos crean fueron concebidos en una estrella, y tal vez, en miles de millones de años más, pasemos a formar parte de una nebulosa, y así el ciclo estelar continúa.
¿Cómo serán los seres que se creen a partir de nuestros átomos? INQUIETANTE PREGUNTA
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